Un pinchazo telefónico a cuenta del "caso Brugal" relacionado con una trama corrupta con el negocio de la basura en Alicante ha permitido sacar a la luz el amaño de partidos por parte de Enrique Ortiz, máximo accionista del Hércules de Alicante, gracias a conversaciones macarriles como esta: "Le di 100.000 euros al portero y se tiró para el otro lado en el gol de Tote... es que fue la hostia, macho". De las escuchas también se derivan indicios de que parte del dinero para el pago de estas primas se habría desviado de los fondos de la Fundación Hércules. Ortiz está imputado por los delitos de cohecho, fraude y tráfico de influencias, pero no por la compra de partidos. El pago de primas para perder no aparece regulado como delito en el vigente Código Penal, aunque sí se ha incluido en la nueva reforma como fraude deportivo. Sin embargo, el fiscal anticorrupción ha solicitado al juez que traslade la investigación de estos hechos al CSD y la RFEF.
Este caso ha sido descubierto casualmente debido a la investigación de otro caso de corrupción mayor, pero resulta evidente que sólo es la punta del iceberg. La gran dificultad de descubrir los casos de compra de partidos y su impunidad permite suponer que son bastante habituales, como ya explicamos aquí.
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1 comentario:
Joder! Estaba buscando alguna web que dijese algunas verdades y me topé con este blog. Comparto todo lo que dices. Muchas felicidades por el blog y ánimo para continuar!!
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